ÚLTIMO POEMA QUE FORMA PARTE DE LA COLECCIÓN "EL INTANGIBLE VIENTO"

VINISTE A MI LECHO

Viniste a mi lecho
como una aparición buscando mis sueños
para nutrirte de ellos
una noche embriagada de sueños y de vino
entre sábanas de miseria y ternura
a ese ángel mío le di
el agua fresca de mi risa triste
el traje gastado de mi piel deshilachada
le di algo que estaba dormido
y ella me dio su duende de risa alada
me dio de beber su juventud
entre copa y copa
como cenicienta que se va a las siete de la mañana
y no deja ningún zapato
deja el suave aroma de su piel de mimbre
dulce como la caña de azúcar ligera se va
como un duende silenciosa sin hacer ruido
así como llegó como llegaste
sacudiendo la desidia que habita en mi vida
entre sábanas revueltas dormidas en sueños de miedo
así entraste en mi vida y en el desván
como una aparición buscando mis sueños
que vuelan entre vientos de perdida ilusión
como un duende entraste en mi vida
cenicienta entre cenizas
descalza para no hacer ruido y despertar
a ese hombre que duerme entre silencios
aunque su vida esté llena de tumultos
y no oiga a ese duende entrando en su vida
porque ese ángel mío
al que le di el tumulto de mi deseo
que en cataratas fluye hacia el vacío
me busca en el milagro de la faz de luz
me busca como una aparición buscara un sueño
que soy un niño escondido en sábanas de espuma y esperma
con anhelo de lodos
entre faros de luz y avenidas silenciosas
a las siete de la mañana la cenicienta se va
en su boca el mar amargo
como un duende en su sexo oscuro
se pasea el deseo sin hacer ruido
su voz dormida se quedó atrapada entre las sábanas y el silencio
de lo que no se pronuncia
así se va ese ángel mío
de puntillas y con la cara llena de sombras y duendes
como una nube de aurora
con anhelo del día.